ADELITA

Hoy dia de Brujas le dedico este escrito a nuestro Brujo de la playa, no se como se llama, pertenece a ese mundo de personas que viven de y en la playa, además es querido por algunos y detestado por otros, como todo en esta vida.
Esta primera foto es una visión de lo elegante y dulce que puede ser un perro de la playa, que tuvo la suerte de ser uno de los adoptados por El Brujo.
El dice que es egipcio, a mi me dice habibi...no se si será verdad.

El Brujo lee los caracoles. A mi me los ha leido pero ,imaginense que tantas cosas me pueden decir a mi a estas alturas de la vida, bueno, que soy una persona muy dificil ,que no es facil complacerme, que tengo en la cabeza a La Virgen de Las Mercedes, en el corazón a la Virgen de la Caridad del Cobre, el usó los dos nombres que tiene, la de los santeros y el católico, y en los pies tengo a Santa Barbara...
Si me pongo a creer esto y le sumo mi mitad de sangre alemana y la otra mitad de Rubio, Tachira, pues quizas tiene razón, soy una persona complicada...

El Brujo camina por la playa leyendo los caracoles, tiene una silla de ruedas que usa para sentarse, realmente no la necesita, la empuja y se sienta cuando se cansa.
Un dia llegó a la licoreria de una amiga mia en su silla, estuvo ahi un buen rato y cuando quiso salir algunos hombres que estaban ahi lo ayudaron, el sentado haciendose el inválido, lo cargaron hasta la otra orilla de la calle, la sorpresa para estas personas fué cuando el Brujo se paró y caminó muy tranquilo empujando su Silla de Ruedas, bueno, le dijeron de todo...

A mi amiga Rhina le ha dicho grandes verdades, ella es una persona tan caritativa que siempre esta pendiente de el. En dias pasados le regalo unos zapatos muy buenos, ella los compró: un dia el Brujo me dijo, dile a Rhina que cuido mucho los zapatos, para dormir los entierro en la arena para que no me los roben y yo duermo encima. Si, porque estos personajes viven en la playa, arma su carpa con cuanto trapo hay y en la mañana cargan con sus pertenencias a otra parte. A veces cuando camino muy temprano he visto su campamento, los perros, gatos y su Silla de Ruedas parada en la puerta de su carpa de trapos...
Gracias Rhina por facilitarme estas fotos para documentar el escrito.