En esos dias acababa de regresar de San Cristobal de la despedida de mi hermana. Nadie se imagina como la extraño y ha pasado un año de esos dias terribles y gracias a las clases de musica mi estado de ánimo no ha estado peor. Encontrar a frida y josé Rafael tan sencillos, amables y sabios ha sido un regalo para nosotros en este pueblo donde son tantas las limitaciones ademas de las personales. Encontrar nuevos amigos y reforzar los existentes ha servido para continuar la vida.